Esta es P/Haruka, a quien conocí gracias a la presentación de una mujer que había sido entrenada para ser una mascota sexual en el pasado. Personalidad seria, tranquila y tímida. Sin embargo, la sensibilidad era muy buena y rápidamente me sentí atraído por el placer del sexo. Después de acostumbrarme a practicar, me puse el uniforme de la empresa, la saqué y ella me rogó por mi polla. Cuando la expandas con su bola anal favorita, derramará lágrimas de alegría. Son criaturas tristes que afirman su identidad a través de servicios sexuales para superar su complejo de inferioridad sobre su apariencia. Espero que todos puedan verlo. Un masoquista es masoquista.